Redada en el Monteblanco de Onda por explotación laboral y trata de personas rumanas
17/12/2019 | 12:06 h
(25 fotos) La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, con sede en Madrid, ha irrumpido poco antes de la 6 de la madrugada de este martes en el número 45 de la avenida del Mar, en Monteblanco (Onda), esquina con la calle Solidaritat. Habría cuatro detenidos, presuntamente, por explotación laboral y trata de personas de su misma nacionalidad.
Había un gran despliegue de efectivos, que sigue todavía al cierre de esta noticia (a las 12 horas), ya que tambien ha participado la Unidad de Seguridad Ciudadana de Castelló (USECIC), Policía Judicital, así como una unidad canina procedente de València, también de la Guardia Civil. Se les sumaban el personal del juzgado de Castelló que lleva el caso, de momento bajo secreto de sumario, entre quienes había dos traductoras rumanas. También había un equipo de Cuatro televisión que emitirá próximamente un reportaje.
Más de diez vehículos policiales permanecían en los alrededores de la casa unifamiliar, en la que más de veinte personas vivían hacinadas. Está siendo minuciosamente registrada en busca de pruebas evidentes. Cuando esté todo vacío está previsto que entre en acción los dos perros de la unidad canina.
Una ONG ha facilitado café, leche y alimentos al puesto de la Guardia Civil de Onda, algunos de cuyos agentes los han llevado hasta el lugar de los hechos para que las más de veinte personas explotadas pudieran reponer fuerzas. Entre los detenidos está el que parece ser el cabecilla de la trama, que ya estuvo en prisión hace unos tres años por un caso similar, según ha comentado gente del vecindario.
Algunas personas que viven cerca han declarado que no sabían nada de lo que pasaba en la casa. Otras, en cambio, han relatado para eltriangulo.es que las personas solían llegar desde Rumanía en septiembre y permanecían en Onda hasta el final de la temporada citrícola, para trasladarse después a Lleida a recoger fruta.
También que les trasladaban a los campos de naranjos en la furgoneta blanca que había en la puerta y otras dos amarillas, más viejas que están aparcadas en los alrededores. Una de ellas tiene los neumáticos muy deteriorados.
"Se trataba de personas amables y simpáticas que saludaban afectuosamente las pocas veces que nos cruzábamos con ellas ", relataba la vecina de la casa contigua. Los detenidos, al parecer, pasaban más temporadas en Onda, aunque sin vivir permamentemente en la vivienda.