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El Pleno de Onda aprueba una moción de OSSP y EUPV para proteger las abejas

El Pleno del ayuntamiento de Onda ha aprobado este miércoles por unanimidad una moción presentada por Onda Sí Se Puede (OSSP) y Esquerra Unida, para realizar una campaña de sensibilización a los productores de cítricos, referente a la no utilización de pesticidas en la época de floración, para no perjudicar al sector apícola.

En la exposición de motivos se puso encima de la mesa que la población global de abejas está desapareciendo a marchas forzadas. Una de las causas de este hecho, es la utilización de pesticidas en la época de floración.Teniendo en cuenta que un 75% de los cultivos del mundo dependen de la polinización de las abejas y otros insectos, no es de extrañar que la ONU esté muy preocupada al respecto y que el organismo encargado de la supervisión de la biodiversidad del planeta, el IPCC, instase a los expertos a documentar las causas científicas que las están matando. Los índices de mortandad de hasta el 15% se consideran normales, pero la media actual es del 30 % llegando en las poblaciones más críticas al 80%. El fenómeno comenzó a registrarse en 1999 y se conoce como síndrome de despoblación de colonias (CCD Colony Collapse Disorder).

El concejal de EUPV, Iván Tauste Ruiz, explica que: “Desde el año 90 se prohibió a los apicultores ponerse en zonas citrícolas obligandoles a realizar la transhumancia antes de tiempo, en vez de abril en marzo, y desde el 89 a instalarse a menos de 5km de las plantaciones susceptibles de padecer la famosa piñolá. Actualmente los técnicos agrícolas de las cooperativas y las casas de venta de productos fitosanitarios, son los que tienen la sartén por el mango y los que más pueden hacer para que se cumpla realmente esta normativa de uso sostenible. Son ellos los que tienen que asesorar bien a los agricultores y quienes han de recordarles su responsabilidad".

Por otra parte, el secretario general de Podemos Onda y concejal de OSSP, Manu Escrig Azor, añade que: “Pensamos que es fundamental la puesta en marcha de un plan de control de explotaciones agrícolas más eficaz, que garantice el uso sostenible de los productos fitosanitarios y disminuya el uso de insecticidas que puedan dañar a las abejas, incorporando mecanismos, medios y protocolos para acabar con las actuales deficiencias tanto en la coordinación de los agentes responsables de su control y vigilancia, como en la formación e información de estos agentes y de los profesionales del sector citrícola sobre las causas reales que se producen. Los citricultores por su parte, tienen que asumir que también les corresponde hacer alguna cosa al respecto, pensamos que deben valorar que la apicultura es un sector que, a parte de producir riqueza para el conjunto de la economia de la Comunidad Valenciana, es clave para el mantenimento del medio ambiente, la biodiversidad y del tejido social del medio rural.”

“Por todo ello el miércoles pedimos que desde nuestro Ayuntamiento se haga una campaña de sensibilización y formación a los productores de cítricos, informando de lo perjudicial que son muchos pesticidas para la salud de las abejas, (algunos también para las personas) y sobretodo las consecuencias negativas que tiene el utilizarlos en época de floración”, comenta Tauste al Triángulo.

Escrig explica que: “Esta moción va en la misma linea que la declaración de nuestro municipio libre de glifosato y de contaminantes hormonales. Estamos orgullosos de ser un Ayuntamiento pionero en estos temas a nivel estatal. No se pueden aplazar las decisiones de las cuales depende nuestra salud y la de nuestro entorno. Tenemos que poner en marcha cuanto antes, una agricultura que sea respetuosa con la vida tanto de las abejas como de las personas.”

En elreciente informe “Alimentos bajo amenaza” elaborado por Greenpeace, se ha calculado que el valor económico de la labor de polinización de las abejas podría estar en torno a los 265.000 millones de euros anuales en todo el mundo, 22.000 millones para Europa y más de 2.400 millones para España, así pués, incluso desde un punto de vista puramente económico, merece la pena proteger a las abejas.

La utilización de pesticidas no és la única responsable de la extinción. Hay otros factores como pueden ser las semillas modificadas genéticamente. Algunas multinacionales como Bayer, Syngenta o Monsanto, comenzaron a comercializar un tipo de semilla blindada, impregnada con fertilizantes y neonicotinoides. Su función era prevenir las plagas, pero ha terminado por convertirse en una arma de destrucción masiva de las poblaciones de polinizadores. Durante décadas se han vendido semillas de este tipo en todo el mundo, sobre todo de maíz, soja y colza. En Europa, desde el 1 de diciembre de 2013, y durante un período de dos años, la autoridad europea de seguridad alimentaria (EFSA) prohibió la venta de este tipo de semillas blindadas. En Estados Unidos de momento no se ha seguido el ejemplo, un detalle más de porque siempre nos hemos mostrado contrarios al Tratado de libre comercio (TTIP), ya que aquí y ahora estamos blindados a este problema, y de firmarse volveríamos a estar expuestos.

Además de un grave daño al sector de la agricultura a nivel global, la desaparición masiva de abejas puede causar a medio plazo la disminución y el encarecimiento de los alimentos en el mundo. Conviene recordar que las abejas realizan un papel fundamental en los ecosistemas debido a que intervienen en los procesos de polinización y fecundación de innumerables especies vegetales, contribuyendo a la perpetuación de las especies y al aumento exponencial de las variedades y del germoplasma vegetal.

Indican el ejemplo de EEUU donde se producen la mitad de las almendras que se consumen en el mundo, pero desde 2009 su producción se ha desplomado, como en el resto del planeta debido a la escasez de abejas. Sin las abejas, encargadas de la polinización del cultivo, el almendro no florece y en la última década, por la sinergia de varios factores catastróficos, se está produciendo una mutilación progresiva de la especie. La despoblación de las colonias de abejas afecta de forma mucho más directa en España, ya que es el primer productor de miel del mundo y la Comunidad valenciana es el primer productor.

En la Comunidad Valenciana, la apicultura es una actividad tradicional y muy arraigada, puntera en la producción de miel a nivel estatal, tenemos una actividad con un gran potencial de futuro si se apoya adecuadamente. Una de las características de esta actividad es la trashumancia, orientación productiva que realiza importantes desplazamientos territoriales en busca de diversas floraciones vegetales. Las dos principales amenazas que padecen son la utilización de productos fitosanitarios y la falta de regulación en la plantación de variedades de cítricos compatibles con la polinización cruzada.

El responsable del sector apícola de la Uniò de Llauradors i Ramaders del País Valencià y Apicultor profesional, Carlos Muñoz, explica en el informe elaborado por Greenpeace que: “La introducción de variedades híbridas trajo consigo la polinización cruzada y la presencia de pepitas en ciertas  variedades de mandarinas. Es la famosa “piñolá”. La expulsión de nuestras colmenas de las zonas citrícolas  arruinó a muchos apicultores valencianos. La miel de  azahar era nuestra mayor fuente de ingresos: estábamos en casa y con alto rendimiento iniciábamos la ruta de  trashumancia. Ahora, desde hace más de veinte años, las sucesivas Órdenes de Polinización Cruzada de la Generalitat  Valenciana, expulsan y marginan al apicultor. Además, se permite la fumigación en floración de cítricos  y se provoca la mortandad de las abejas y demás  polinizadores. Se produce la más grotesca contradicción: tenemos la marca de calidad para la miel de azahar  valenciana y no podemos producirla.”

El Ayuntamiento de Onda realizará una campaña de sensibilización a través de la formación enfocada a los productores de cítricos, en referencia a la no utilización de pesticidas en la época de floración para no seguir perjudicando al sector apícola y poniendo especial atención a que las abejas son las responsables de la polinización de todas las especies cultivadas. Esta nueva iniciativa va en la misma linea y se suma a las ya publicadas en este medio, municipio libre de glifosato  y contaminantes hormonales.